|
Algunos de los impactos producidos contra el
planeta Marte y la Luna han conseguido arrancar rocas de su superficie que han
escapado de la atracción gravitatoria de estos objetos, situándose así en órbita
alrededor del Sol. Miles de millones de años después, algunas de ellas han
llegado a la Tierra en forma de meteoritos. Estas carambolas cósmicas nos han
permitido disponer de materiales únicos que nos proporcionan información de gran
interés científico.
Los meteoritos que proceden de la Luna y de
Marte son de tipo
rocoso.
Todos ellos son acondritas.
|